El compromiso con la educación en América Latina representa un enorme desafío, especialmente considerando la necesidad imperante de abordar las cifras preocupantes de analfabetismo en la región. ¿Cómo lograr cambios reales, profundos, sostenibles? ¿Cómo podemos inspirar a millones de niños, niñas, adolescentes y adultos a descubrir el placer de la lectura, a escribir sus nombres con orgullo y a perseguir sus sueños con determinación? ¿Cómo trabajar desde todos los espacios, público, privado y tercer sector, de manera coordinada y bajo los mismos objetivos? 

Las respuestas a esas preguntas son complejas, pero desde Instituto Natura nos embarcamos en esa misión hace más de diez años en Brasil y tan solo cuatro en Argentina, Chile, Colombia, México y Perú con un enorme y esperanzador sueño: lograr un mundo justo, próspero y solidario donde la educación sea de todas y para todas las personas. 

Es enorme el orgullo que sentimos de que las personas que más saben de esto reconozcan el trabajo que realizamos, que ya tuvo enormes resultados y que tiene detrás a muchas personas comprometidas, apasionadas y solidarias. 

Tomamos este premio como un reconocimiento a los logros alcanzados y un impulso para seguir expandiéndolo, alcanzando nuevos territorios, llegando a nuevas escuelas y cambiando la vida de miles de estudiantes. 

Agradecemos a todos aquellos que han sido parte de este viaje, ya que este logro es también suyo. Juntos, continuaremos construyendo un futuro donde la educación sea un derecho para todas y cada una de las personas.